Wang nació en una familia normal y corriente. Su padre se gana la vida escribiendo y su madre realiza trabajos ocasionales para mantener a la familia. Wang también tiene un hermano menor cuya familia es muy pobre. Wang era muy moreno y tenía los ojos feos cuando nació. Debido a su baja autoestima, Wang se quedaba en casa y se dedicaba a cuidar de su hermano menor, y rara vez salía. Más tarde, el padre de Wang falleció y la vida de la familia se volvió aún más difícil.
Hasta que un día, un rey taoísta llegó al pueblo. El sacerdote taoísta vio la apariencia de Wang y le dijo a su madre que podía embellecer a Wang, pero con una condición: se llevaría al hermano menor de Wang. Al ver que la madre de Wang dudaba, el sacerdote taoísta dijo que madre e hijo se volverían a encontrar si hubiera una posibilidad en el futuro, y la madre de Wang estuvo de acuerdo. Más tarde, el sacerdote taoísta realmente embelleció al rey, pero también se llevó al hermano menor del rey según lo acordado, y nunca volvió a aparecer. Wang se puso muy triste cuando supo la verdad.
Más tarde, Wang fue seleccionada como concubina en el palacio debido a su belleza después de la cirugía plástica. Wang es un hombre inteligente. Se hizo amiga de sus compinches y encontró apoyo a través de sus propias habilidades. Al final, ganó la cruel competencia en el harén y se sentó en el trono de la reina. Esta historia es sólo una leyenda y no tiene base histórica.