¿Quién puede ayudarme a escribir un ensayo sobre los cambios históricos de mi familia?

Mi familia ha cambiado dramáticamente en los últimos 30 años. Como los que nacimos en los años 1970, no tenemos la palidez y la locura de los años 1960, ni la elegancia y el disfrute de los años 1980. Somos la generación del sol con amargos recuerdos de la infancia, que tocamos el tambor de la juventud y nos bañamos en el sol de la reforma y la apertura. Nuestra generación ha experimentado el "sistema de responsabilidad doméstica" y realmente puede sentir su amargura y dulzura.

En mi memoria, cuando era joven, me gustaba comer una paleta de 5 centavos, ir de compras con los adultos y envidiaba a mis amigos que se sentaban en la calle a comer gelatina de aceite. Lo más feliz de mi familia es repartir cupones de alimentos y cupones de carne para comprar arroz y carne. Cuando era pequeña, era seguidora de mi madre. A menudo sigo a mi madre al depósito de cereales para comprar arroz y fideos.

Cuando éramos niños, lo más feliz era que los adultos nos confeccionaran ropa nueva durante las vacaciones. El poliéster y el kapok eran los tejidos más de moda en aquella época. Sin embargo, siento que mi vida de niño fue relativamente pura. Estoy muy satisfecho con la comida y la ropa.

Recuerdo que nuestra vida familiar cambió silenciosamente a partir de 1980. En aquella época, como a menudo escribíamos en nuestras composiciones, la brisa primaveral de la reforma se extendía por todo el país. De vez en cuando se añaden a la casa televisores, radios, máquinas de coser, ventiladores eléctricos y otros electrodomésticos, y los cupones para carne ya no son necesarios. Cuando están felices, suelen salir a la calle a comprar ropa nueva, para que la familia no tenga que preocuparse por la comida y la ropa.

La vida cambia cada día. Cuando nosotros, nacidos en los años 70, cumplimos 30 años, el nivel de vida de nuestra familia cambió drásticamente. Nuestra familia tenía una casa y unos coches preciosos y hacíamos trucos todos los días. Los niños ya no esperan con ansias la llegada del Año Nuevo todos los días como lo hacíamos nosotros entonces. Ahora nos sentimos como la generación más feliz... No podemos cambiarnos completamente a nosotros mismos.