El viejo Bing Xin dijo una vez: "El amor es la base de la educación y la fuente de la formación docente. Con amor, hay de todo. Sí, los profesores como nuevos miembros de la sociedad". Los guías de crecimiento tienen responsabilidades que son diferentes a las de otras profesiones. Este tipo de responsabilidad es invisible y enorme, y necesita que los docentes la asuman en silencio con su amor por la profesión docente y los estudiantes. El amor y la responsabilidad son el alma de la ética profesional de los docentes. El amor y la responsabilidad del maestro son como una vela que ilumina la ventana del alma de los estudiantes y guía a innumerables jóvenes a buscar una vida mejor.
El amor es un tema eterno. El amor de un maestro por sus alumnos es una sinceridad que dedica todo su corazón y talentos a sus hijos. Este tipo de amor es desinteresado. Dedicado sin reservas a todos los estudiantes. Este tipo de amor es profundo y está incluido en todo lo que usted hace por todos los estudiantes; este tipo de amor es sagrado y puede condensarse en una amistad armoniosa.
El educador Suhomlinsky dijo una vez: "¿Qué es lo más importante en mi vida? Puedo responder sin dudarlo: 'El amor es como un niño'. Sí, enseñar y educar a las personas, amar la vida como los niños es una cualidad que deben poseer los docentes, y también es una responsabilidad ineludible de los educadores. El amor es la fuente de la educación. Con amor, los maestros pueden proteger la tranquilidad y construir un hogar espiritual que ame su trabajo y su vida como niños. Con amor, los profesores pueden utilizar la calidez para derretir el "hielo" acumulado en los corazones de los estudiantes. Con amor, los profesores pueden encontrar la clave para abrir los corazones de los estudiantes. Algunas personas dicen: El amor del Maestro es como el rocío, que puede revivir incluso un corazón marchito; El amor del Maestro es como la brisa primaveral, que puede derretir incluso los sentimientos congelados. El amor del Maestro es como la lluvia primaveral, que "se cuela en la noche con el viento y humedece; cosas en silencio." Por amor somos pacientes; por amor nos preocupamos; por amor somos cercanos a nuestros compañeros de clase. El amor es la luz del sol, que puede derretir el hielo; el amor es la lluvia primaveral, que puede hacer brotar la hierba seca; el amor es una especie de poder mágico que puede convertir las piedras en oro;
Nuestros profesores son leales a la causa educativa del Partido y el pueblo. Debemos aprender a ser un maestro amoroso y construir con amor un templo sagrado para nuestros alumnos. En este templo estamos llenos de espiritualidad creativa, risas y atención humanista, permitiendo a los estudiantes sentir que el amor del maestro está en todas partes. ¡Sigamos creciendo como docentes y mejoremos nuestro autocultivo! ¡Utilicemos una buena ética docente para sostener el cielo azul de la educación!
Tenemos una vida docente plena. Debemos dar nuestro amor, nuestros hijos y nuestra carrera desinteresadamente y sin arrepentimientos. Creo que cuando nuestra vida llegue a su fin, podremos decir con orgullo: "El cielo no ha dejado rastro de mí, pero he volado".