En ese momento, un león se acercó y se detuvo frente a la Puerta Xuanhe. El granjero se desmayó y pensó que el león era su alucinación, así que dejó de preocuparse. Pronto, también vino aquí una niña. Pronto encontró al león y se asustó mucho. Sin embargo, el granjero le dijo que no tuviera miedo porque aquí se respeta a los leones. La niña siguió su consejo y logró cruzar la puerta sana y salva.
Esta historia nos cuenta que en la antigua Grecia, la Puerta Xuanhe era una puerta importante de la ciudad y era ampliamente reconocida y respetada por la gente. Además, esta historia también nos envía un mensaje sobre la bondad y la tolerancia, es decir, debemos respetar las ideas y creencias de los demás y esforzarnos por comprenderlas.