El abuelo educa a su nieto sobre la evasión de tarifas. ¿Es digno de elogio el comportamiento del abuelo?

Después de que su nieto evadió las tarifas, su abuelo le dio una dura lección y le pidió que pasara su tarjeta nuevamente para entrar por el torniquete. Este comportamiento también es muy digno de elogio. El abuelo utilizó sus propias acciones para educar a su nieto a ser honesto y no codiciar ganancias insignificantes. El comportamiento del abuelo puede dejar una profunda impresión en su nieto y establecer un sentido de integridad desde una edad temprana.

Existe un vídeo que ha suscitado una acalorada discusión entre los internautas en Internet. El contenido del vídeo es este. Un anciano tomó el metro con su nieto. El abuelo pasó su tarjeta primero y pasó la puerta. Más tarde, descubrió que su nieto lo había seguido hasta la puerta sin pasar su tarjeta. Después de que el abuelo descubrió este comportamiento, le dio a su nieto una educación estricta y le pidió que regresara y pasara su tarjeta para pasar la puerta. Muchos internautas elogiaron al anciano después de ver este vídeo. Este abuelo dio un buen ejemplo a su nieto y utilizó sus propias acciones prácticas para pedirle que estableciera un sentido de integridad desde una edad temprana. La evasión de tarifas es en realidad un comportamiento incivilizado. Este tipo de ganancia insignificante no es aconsejable. Debemos ser ciudadanos honestos y dignos de confianza.

De hecho, el comportamiento de este abuelo también ha hecho sonar la alarma a muchas personas sobre cuántas personas en esta sociedad no son tan buenas como este abuelo. ¿Cuántos jóvenes evaden siquiera descaradamente los billetes? Este tipo de comportamiento incivilizado en realidad está empañando la imagen de esta ciudad. Como generación más joven, debemos establecer una buena imagen para que nuestra sociedad se desarrolle cada vez mejor. Debemos aprender del comportamiento de este abuelo y detenerlo rápidamente cuando encontremos que otros se comportan de manera incivilizada. Especialmente la generación más joven debe cultivar un sentido de integridad desde una edad temprana.

El funcionamiento continuo de una sociedad es inseparable del mantenimiento del concepto de integridad. Una vez que se pierda la integridad, no habrá confianza entre las personas y el funcionamiento de esta sociedad se volverá gradualmente incivilizado. Una sociedad civilizada comienza contigo y conmigo. Debemos utilizar nuestras propias acciones prácticas para crear una sociedad armoniosa y civilizada.