1. Crear un entorno en inglés: crear un entorno de aprendizaje en inglés en casa, como tocar canciones en inglés, ver dibujos animados o películas en inglés y usar el inglés. etiquetas y carteles. Esto expondrá a los niños a los usos cotidianos del inglés.
2. Aprenda inglés con sus hijos: Aprender inglés con sus hijos puede aumentar la interacción entre padres e hijos y la diversión del aprendizaje. Puede elegir libros de texto en inglés, libros ilustrados o recursos en línea adecuados para la edad de su hijo para aprender juntos palabras, frases y oraciones simples.
3. Crear situaciones y juegos de roles: Deja que los niños utilicen el inglés en situaciones reales creando situaciones y juegos de roles. Por ejemplo, simule ir de compras, pedir comida en un restaurante o consultar a un médico, para que los niños puedan comunicarse en inglés.
4. Fomentar la expresión hablada en inglés: Anima a los niños a expresar sus pensamientos y sentimientos en inglés. Las habilidades de expresión oral de los niños se pueden estimular haciendo preguntas, discutiendo temas o jugando juegos, y brindándoles modelos de lenguaje correctos y retroalimentación.
5. Utilice recursos multimedia: utilice recursos de aprendizaje de inglés en Internet, como sitios web de aprendizaje de inglés, aplicaciones y cursos en línea. Elija recursos que sean apropiados para la edad y el nivel de su hijo, lo que le permitirá mejorar su inglés en un ambiente de aprendizaje divertido.
6. Cultive hábitos de lectura: anime a los niños a leer libros ilustrados, libros de cuentos o artículos sencillos en inglés. Pueden leer y contar historias juntos para ayudar a los niños a comprender el contenido de la historia y las palabras nuevas.
7. Crear juegos de lenguaje: Incrementar el interés y la participación de los niños en inglés a través de juegos de lenguaje. Como Scrabble, acertijos, juegos de rol, etc., que permiten a los niños aprender y utilizar el inglés en los juegos.
Es importante que los padres den a sus hijos paciencia, ánimo y comentarios positivos para crear un ambiente de aprendizaje relajado y positivo. Al mismo tiempo, el tiempo de estudio debe organizarse adecuadamente según la edad y los intereses del niño para evitar presiones y cargas excesivas.