Uf, hombre, ¿sabes de dónde viene el yo-yo? No, no te estoy pidiendo que me digas el nombre de tu juguetería local. Lo siento, déjame reformular eso. ¿Puedes contarme su historia? Amigos, creen que Donald Duncan inventó el yo-yo, ¿verdad? ¡Olvídalo! ¡Los yo-yos tienen casi 1.000 años!
En aquella época, niños de todo el mundo ya jugaban con un juguete similar, pero en aquella época no se llamaba yo-yo. Cuenta la leyenda que el yo-yo se originó en China. Los niños de la antigua Grecia jugaban con un pequeño juguete parecido a un carrete ya en el año 500 a. C., y los arqueólogos han descubierto especímenes idénticos en otros países, incluido Egipto.
¿Qué aspecto tiene? Los primeros yo-yos estaban hechos de madera, metal o incluso arcilla y decorados con pintura. Consiste en una pequeña varilla redonda conectada entre dos discos. Se ata una cuerda delgada al poste redondo y el otro extremo de la cuerda se ata al dedo. Cuando se lanza el disco, ¡rueda hacia adelante y hacia atrás alrededor de la cuerda!
Debido a su sencillez y diversión, el yo-yo se extendió rápidamente desde China hasta Europa. ¡En Filipinas, empezó a llamarse yo-yo! "Liu Liu" significa "regresar", tal como se juega.
El 65 de abril de 2002, el Yo-Yo fue enviado al espacio por el transbordador espacial Discovery de la NASA. Como parte de su programa de investigación, participará en experimentos espaciales.
Aunque el yo-yo no hace más que repetir sus movimientos de un lado a otro durante miles de años, su popularidad en el mundo nunca parará.