La aplicación prolongada de fertilizantes químicos puede causar fácilmente dos peligros principales: en primer lugar, el lavado del agua de lluvia provoca la pérdida de una gran cantidad de fertilizantes químicos, lo que no sólo genera residuos, sino que también contamina los cuerpos de agua; en segundo lugar, la aplicación prolongada de fertilizantes químicos provoca el endurecimiento del suelo y la pérdida de materia orgánica, lo que afecta la calidad de los frutos de los cultivos. Las pruebas han demostrado que la aplicación de carbón en polvo no sólo puede prevenir las deficiencias anteriores, sino también mejorar eficazmente la eficiencia de los fertilizantes y lograr el propósito de aumentar la producción y los ingresos.
El polvo de carbono es un subproducto de la gasificación de la paja vegetal en retorta. Concentra una gran cantidad de oligoelementos necesarios para las plantas (potasio, calcio, sodio, magnesio, zinc, manganeso, etc.) y puede. Proporcionar energía a las plantas. Proporcionar una nutrición adecuada.
El carbón en polvo tiene una gran área de adsorción, alrededor de 200-300 m2/g, lo que equivale al carbón activado de baja calidad. La aplicación de carbón en polvo al campo puede fijar nitrógeno, prevenir la pérdida de fertilizantes y ampliar la eficiencia de los mismos. Y debido a que la capacidad de absorción de agua del carbón en polvo es 4-5 veces mayor que la propia, también tiene la función de conservar agua.
El color negro del polvo de carbón tiene una mejor absorción del calor solar, lo que puede aumentar considerablemente la temperatura de la superficie. Las pruebas han demostrado que cuando se espolvorean unos 200 g de polvo de carbón sobre 1 m2 de superficie del suelo, la temperatura de la superficie aumentará 7°C.
El carbón en polvo contiene un 60% de calcio, potasa y otros ingredientes que pueden neutralizar el suelo ácido, complementar los elementos minerales y aumentar los oligoelementos.
Además, el carbón en polvo también tiene la función de aflojar el suelo y preservar la humedad, y tiene efectos significativos en la mejora de la calidad del suelo, el aumento de la eficiencia de los fertilizantes y el aumento del rendimiento de los cultivos.