Estos levantamientos sacudieron la opresión colonial española en estos países. El gobierno de Estados Unidos hizo falsas promesas de ayudar a los rebeldes en Cuba y Filipinas a luchar por la independencia para atraerlos a su lado contra España. Después de que España rechazara un ultimátum estadounidense que le exigía que abandonara Cuba, Estados Unidos inició operaciones militares contra España el 22 de abril de 1898, sin declarar la guerra, y envió escuadrones a las costas de Cuba y Filipinas. El 1 de mayo, la escuadra estadounidense entró en la bahía de Manila, llevó a cabo un ataque sorpresa y aniquiló a la escuadra española. Luego, la Fuerza Expedicionaria Estadounidense desembarcó en la Costa del Golfo y, junto con los rebeldes filipinos, derrotó la resistencia española. El 13 de agosto cayó la sitiada Manila.
Al mismo tiempo, también se desarrollaba la batalla en el Caribe. La zona marítima se convirtió en el principal campo de batalla de la Guerra Hispanoamericana. Dos escuadrones americanos bloquearon Cuba, donde España tenía 200.000 soldados y un escuadrón. Antes de esto, el oeste de Cuba estaba ocupado por el Ejército Libertador de Cuba. En junio, 18.000 fuerzas expedicionarias estadounidenses que se dirigían a bloquear la ciudad fortaleza de Santiago desembarcaron a 30 kilómetros al este de la ciudad. El 3 de julio la escuadra española aquí fondeada fue aniquilada en un intento de romper el bloqueo. En julio de 2016, la Fuerza Expedicionaria Estadounidense cooperó con la flota y el ejército rebelde para ocupar la fortaleza. A principios de agosto, el ejército español fue completamente derrotado en Cuba. De julio a agosto, el ejército estadounidense ocupó el oeste de Puerto Rico. Al ver que no había esperanzas de victoria al continuar la guerra, España firmó un acuerdo de armisticio con Estados Unidos en agosto de 2012. Estados Unidos pudo derrotar a los colonos españoles en Cuba y Filipinas principalmente gracias al arduo trabajo de los insurgentes cubanos y filipinos. Sin embargo, el imperialismo estadounidense traicionó a sus aliados y absorbió los frutos de la victoria. El 10 de diciembre de 1898 se firmó el Tratado de París.
Según el tratado, Filipinas, Puerto Rico y Guam fueron cedidos a Estados Unidos; Estados Unidos se comprometió a pagar a España 20 millones de dólares como compensación. Cuba, bajo la ocupación estadounidense, obtuvo formalmente su independencia, pero en realidad se convirtió en un protectorado estadounidense. Lenin creía que la guerra hispanoamericana fue un importante punto de inflexión histórico, que marcó el comienzo de la era del imperialismo. Esta guerra demostró la creciente influencia de los factores económicos y la nueva tecnología y equipo de combate en el curso y resultado de la guerra, demostró la necesidad de una planificación cuidadosa de las operaciones cooperativas entre flotas y soldados de desembarco, y marcó el desarrollo de la erudición naval. El comienzo de una nueva fase, que surgió con la aparición de la flota blindada.