Animales
Hablando de sudoración, todo el mundo sabe que esta es una de las formas con las que el ser humano controla su temperatura corporal. Cuando la temperatura corporal es demasiado alta, el cuerpo se enfría mediante la evaporación del sudor. De hecho, incluso si la superficie de tu piel está seca, tu cuerpo sigue perdiendo agua y manteniendo calor. Sin embargo, no todos los mamíferos han desarrollado glándulas sudoríparas como los humanos. Las glándulas sudoríparas del caballo se encuentran debajo de las axilas. Cuando corren rápido, sudan profusamente por las axilas. Entonces, si realmente existe un "caballo sangriento", entonces debe ser rojo debajo de las axilas.
Las glándulas sudoríparas de los perros también son un tema que preocupa a todos. Cuando los perros necesitan refrescarse, siempre sacan la lengua y respiran con dificultad, por lo que mucha gente piensa que las glándulas sudoríparas de los perros crecen en sus lenguas, o incluso que los perros no tienen glándulas sudoríparas. En realidad, esto es un malentendido. Los perros no carecen de glándulas sudoríparas, como todos los demás mamíferos, también tienen glándulas sudoríparas y están ubicadas por todo el cuerpo. Sin embargo, lo que estas glándulas sudoríparas secretan no es el tipo de sudor que se puede utilizar para refrescarse en nuestro sentido diario, sino un líquido de color amarillo claro y ligeramente viscoso. Estos líquidos pueden generar bacterias fácilmente y desprender mal olor debido a la acción de las bacterias. Piensa en el "olor corporal" y sabrás cómo es. De esta forma, es fácil entender por qué a los perros les gusta sacar la lengua. La boca está llena de agua y la evaporación de esta agua también puede quitarle calor, por lo que el perro usa la saliva para sudar.
Humanos
Los únicos que realmente pueden lograr el "sudor en cascada" son los humanos. Esta habilidad especial del ser humano es probablemente el resultado de la evolución. No hace mucho, los humanos todavía vivían acurrucados en las praderas africanas para ganarse la vida. La caza proporciona a las personas proteínas esenciales para la supervivencia. Sin embargo, los humanos no tienen el poder de las garras, no son lo suficientemente fuertes como para transportar calderos y no pueden correr tan rápido como la mayoría de los otros animales. ¿En qué habilidades confían para adquirir el hábito de comer carne?
La respuesta está en "Waterfall Sweat". Debido a que pueden sudar libremente, cuando realizan ejercicios extenuantes de larga duración, los humanos pueden mantener la temperatura corporal reponiendo constantemente agua y luego transpirando. Esta característica otorga al ser humano la capacidad de viajar largas distancias. Sin embargo, los animales cazados son propensos a sufrir anormalidades debido a la temperatura corporal excesiva, e incluso terminan "muriendo por agotamiento".
Los científicos incluso especulan que la diferencia en la capacidad de sudoración entre hombres y mujeres se debe a esto. Después de todo, en los primeros días del desarrollo humano, el trabajo de caza pertenecía básicamente a los hombres. En este sentido, es el "sudor en cascada" el que hace al ser humano.