Nuestra familia ha vivido en Japón durante décadas. Todos mis amigos suelen jugar más en sus teléfonos que en sus ordenadores y rara vez van a salas de chat. Si uno se encuentra con algunos japoneses, en su mayoría son hombres mayores y muy pocos jóvenes. A lo sumo, charlábamos un rato mientras jugábamos.
Es difícil entender japonés en línea.