Materiales:
Una hoja de papel cuadrada
Pasos:
1. Coloca el papel sobre la mesa, asegurándote de que los bordes estén alineados.
2. Dobla el papel en diagonal por la mitad para que las dos esquinas se crucen.
3. Desdobla el papel y luego dobla ambos lados del papel por la mitad para que las líneas centrales de los lados superior e inferior queden alineadas.
4. Dobla ambos lados del papel por la mitad hacia la línea central para que las diagonales de ambos lados se crucen.
5. Usa tus dedos para presionar suavemente donde se cruzan las líneas diagonales y dobla ambos lados del papel hacia adentro para que el papel se convierta en un rectángulo.
6. Dobla el borde superior del papel hacia el borde inferior de modo que el borde inferior del papel coincida con el borde superior.
7. Dobla el lado derecho del papel por la mitad hacia la izquierda para que el lado derecho del papel coincida con el lado izquierdo.
8. Dobla el papel por la mitad entre las líneas centrales de la esquina superior derecha y la esquina inferior izquierda para formar un triángulo.
9. Dobla el papel por la mitad entre la línea central de la esquina superior izquierda y la línea central de la esquina inferior derecha para formar un triángulo más pequeño.
10. Dobla las dos pequeñas partes triangulares del papel.
11. Dobla ambos lados del papel para que la parte inferior forme una V.
12. Dale la vuelta al papel de modo que la V quede hacia abajo y luego dobla las esquinas de ambos lados hacia afuera.
13. Dobla las dos pequeñas partes triangulares del arco hacia abajo para hacer la forma más estable.
14. Utilice los dedos y las uñas para aplanar suavemente los pliegues para que el barco quede más plano.
¡En este punto, un simple barco está plegado! Puedes hacer una variedad de barcos usando diferentes colores y texturas de papel. Si quieres que el barco sea más estable, puedes poner un poco de pegamento en la parte inferior del papel o asegurarlo con cinta adhesiva. Además, también puedes dibujar la cabina y navegar en el barco para hacerlo más vívido. Apilar botes no es solo una actividad artesanal divertida, sino también una hermosa decoración o juguete. Ya sea que lo coloques en tu estantería o flotes en el agua, puede brindarte alegría y creatividad. ¡Ven y pruébalo!