No retrocedas, no muestres miedo
Cuando los niños se enfrentan a la violencia, primero debemos decirles claramente que la violencia no puede resolver el problema. No obstante, debemos enseñar a nuestros hijos a no retroceder ante la violencia y mucho menos a mostrar miedo. Porque la esencia de la violencia es explotar el miedo de la otra persona. Sólo si se mantiene la calma y la fuerza se podrá realmente disuadir a los perpetradores.
Elige amigos y mantén la distancia.
Al mismo tiempo, oriente a los niños para que aprendan a elegir amigos. Mantenerse alejado de las personas violentas es la mejor manera de protegerse. Deje que sus hijos comprendan que cada uno tiene sus propios valores y códigos de conducta, y que tienen derecho a elegir con quién asociarse.
Busque ayuda de inmediato
Si su hijo encuentra un problema o se siente amenazado, anímelo a buscar ayuda de inmediato. Los padres y profesores son su firme apoyo. Hágales saber a sus hijos que el hogar es siempre su refugio seguro, sin importar dónde se encuentren.