Respetar la personalidad y los deseos de los niños: los japoneses prestan atención a respetar la personalidad y los deseos de los niños, los animan a aprender y explorar de forma independiente, les dan más libertad y espacio y les ayudan. Los niños se convierten en personas independientes, seguras y responsables.
Desarrollar las habilidades sociales de los niños: los japoneses otorgan gran importancia a las habilidades sociales de los niños, los alientan a participar en diversas actividades sociales, comunicarse con sus compañeros y cultivar el espíritu de equipo y las habilidades de cooperación de los niños.
Dar importancia a la educación familiar: los japoneses creen que la educación familiar es muy importante. Los padres deben participar en el estudio y la vida de sus hijos tanto como sea posible para proporcionarles un ambiente familiar estable y cálido.
Establecer disciplina y hábitos: los japoneses se centran en cultivar la disciplina y los hábitos de los niños, alentarlos a mantener regularidad y autodisciplina en la vida diaria y cultivar el sentido de responsabilidad y los buenos hábitos de comportamiento de los niños.
Defender el espíritu del colectivismo: los japoneses otorgan gran importancia al espíritu del colectivismo, alientan a los niños a contribuir al colectivo y se centran en el trabajo en equipo y la asistencia mutua.
En términos generales, los japoneses prestan atención al cultivo de la personalidad y las habilidades sociales de los niños, enfatizan la educación familiar y los hábitos de disciplina, y promueven el cultivo del colectivismo y las habilidades cooperativas.