Un ambiente familiar cálido y armonioso
El ambiente familiar es la cuna para formar el carácter y las cualidades del niño. Los padres deben crear un ambiente familiar cálido, armonioso y amoroso y convertirse en los mejores maestros y amigos de sus hijos.
Dar espacio libre a los niños.
No interfieras demasiado en la vida de tus hijos y déjales aprender a pensar y resolver problemas de forma independiente. Los padres deben aprender a dejarse llevar y dejar que sus hijos prosperen en una libertad moderada.
Elogios y estímulo oportunos
Los niños necesitan afirmación y estímulo para su crecimiento. Cuando los niños progresan o hacen algo bien, los padres deben elogiarlos y afirmarlos de manera oportuna. Esto estimulará la confianza en sí mismos y el sentido de logro de los niños, haciéndolos más valientes para perseguir sus sueños.
Recompensas moderadas
Las recompensas pueden motivar a los niños, pero una dependencia excesiva de las recompensas hará que los niños pierdan su motivación intrínseca. Los padres deben prestar atención a cultivar el interés y el sentido de responsabilidad de sus hijos, para que a ellos les guste aprender y crecer desde el fondo de sus corazones.