La educación ayuda a los niños a comprender que compartir es felicidad.

Los niños de hoy son cada vez más necesitados, pero también cada vez más tacaños y egoístas, y no comparten con los demás. Aunque este tipo de "tacañería" no es un gran problema, si no se corrige a tiempo será difícil entablar buenas relaciones interpersonales con los demás.

Qiqi es un niño testarudo de nuestra clase. Los demás no pueden tocar sus juguetes y él no quiere jugar con los juguetes de otras personas. Un día trajo de casa un avión deformado, lo que llamó la atención de los chicos de la clase. Después de la cena, todos se reunieron a su alrededor, pero él sostuvo el avión con fuerza en sus brazos y mantuvo su expresión.

Me acerqué silenciosamente a él y le dije: "¿Un juguete en tus brazos todavía te puede traer felicidad?"

Qiqi: "No quiero jugar con ellos. Traído de casa”.

Maestro: “Puedes compartir los juguetes que traes al jardín de infantes. De esta manera obtendrás más felicidad, ¿no es una lástima que no podrás jugar? ¿El avión?

Qiqi pensó por un momento y dijo: “Entonces jugaré con ellos y no dañaré el avión”.

Maestro: Analicemos las reglas. del juego Lo prometo. ¿Qué tal la seguridad de los aviones transformadores?

Qiqi asintió, así que llamé a los otros niños y les dije: "Qiqi está dispuesto a jugar contigo ahora, pero debes establecer las reglas cuando juegues para evitar dañar el avión". Los vi divirtiéndose y estallando en carcajadas de vez en cuando.

Compartir es un comportamiento que los niños suelen utilizar en la comunicación. A veces, la razón por la que los niños no están dispuestos a compartir con los demás es porque piensan que compartir significa perder. Como maestro, debe hacerles entender a sus hijos que compartir es alegre y guiarlos adecuadamente para que todos se sientan cálidos y felices.