Odia aprender
La presión excesiva puede hacer que los niños odien aprender. Cuando se espera que los niños cumplan estándares excesivamente altos, es posible que sientan una presión abrumadora. Esta presión puede hacer que pierdan interés en aprender o incluso que eviten aprender.
Afecta a la salud física y mental
El estrés excesivo puede afectar la salud física y mental de los niños. El aprendizaje intensivo a largo plazo puede causar problemas psicológicos como ansiedad y depresión en los niños y también puede afectar su salud.
Confusión y confusión
Obligar a los niños a seguir un camino que no les gusta puede hacer que los niños se sientan perdidos y confundidos en sus futuras carreras.
Respetar los intereses y las elecciones
Debemos respetar los intereses y las elecciones de nuestros hijos en lugar de buscar ciegamente escuelas prestigiosas.
Crear un ambiente de aprendizaje agradable
También es necesario crear un ambiente de aprendizaje relajado y agradable para los niños, de modo que los niños puedan divertirse aprendiendo, cultivando así el entusiasmo y el interés de los niños en aprendiendo.