2. Efectivamente, al principio todos eran iguales. Cuando llegué por primera vez a Japón, lloré cuando leí la carta de mi madre. Pero ahora siento que venir a Japón es realmente genial.
3. Estuve muy ocupado durante este período y no pude contactar a Gao Sang. Gao Sang me llamó ayer y me dijo en tono muy enojado: "No importa lo ocupado que estés, siempre tienes tiempo para hacer una llamada telefónica".