Cinco principios de las metas educativas

Para garantizar la realización fluida de los objetivos educativos, debemos seguir los siguientes cinco principios.

Principio de Integridad

Los objetivos educativos son un todo orgánico, que incluye emociones, actitudes, valores, conocimientos y habilidades. Sólo integrándolos se podrán revitalizar los objetivos educativos.

Principio de subjetividad

Los objetivos educativos deben basarse en la perspectiva de los estudiantes y reflejar plenamente el concepto de desarrollo estudiantil. Los docentes deben cambiar sus roles y convertirse en guías y participantes de los estudiantes en lugar de simplemente docentes, controladores o líderes.

Principio de Calificación

El diseño de objetivos docentes debe enseñar a los estudiantes de acuerdo con su aptitud, de manera que cada estudiante pueda lograr su propio desarrollo en la docencia. Teniendo en cuenta las diferencias en la estructura del conocimiento y la capacidad de comprensión de diferentes estudiantes en diferentes clases y en la misma clase.

Principio de comprobabilidad

Los objetivos de enseñanza deben ser específicos y mensurables, de modo que la función de evaluación pueda utilizarse plenamente. Al establecer los objetivos de enseñanza, debe ser preciso, estandarizado y estandarizado para que se pueda realizar una evaluación y ajuste efectivos durante el proceso de enseñanza.

Principios Dinámicos

Considerar diversos factores antes de la clase para formular objetivos de enseñanza. En la enseñanza en el aula, si hay una desviación del objetivo original, los profesores deben hacer ajustes flexibles para ayudar a los estudiantes a aumentar sus conocimientos y mejorar sus habilidades, protegiendo al mismo tiempo el espíritu independiente de los estudiantes y reflejando verdaderamente su posición dominante.

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