En general, las analogías van de orden inferior a orden superior (quizás refiriéndose a funciones o aritmética de proporciones iguales): suma con multiplicación, resta con división, productos con potencias, división con raíces.
También hay analogías del plano al sólido: perímetro a área de superficie, área a volumen.
De hecho, lo más difícil de la analogía es captar los coeficientes. A veces no está claro si cambiarlos o no.
Pero la forma más correcta de hacer preguntas de analogía es leer el significado de la pregunta y calcularlo directamente, en lugar de adivinar.