A principios de 2016, el "Reglamento sobre bibliotecas en colegios y universidades" emitido por el Ministerio de Educación señaló que las bibliotecas deben participar plenamente en el cultivo de los talentos escolares y aprovechar plenamente el papel del segundo aula y adoptar diversas formas para mejorar la calidad integral de los estudiantes.
El reglamento señala que las instituciones de educación superior deben apoyar a las bibliotecas para que realicen investigaciones académicas de manera planificada, organicen y participen en actividades de intercambio académico nacionales y extranjeros y publiquen los resultados de las investigaciones. Apoyar a las bibliotecas para que participen activamente en grupos académicos profesionales y soliciten unirse a organizaciones académicas internacionales de acuerdo con las regulaciones nacionales pertinentes. Las bibliotecas deben alentar a los bibliotecarios a postularse para diversos tipos de proyectos de investigación científica en todos los niveles y, si las condiciones lo permiten, pueden establecer sus propios proyectos de investigación científica.
Además, los colegios y universidades deberían incluir fondos para bibliotecas en sus presupuestos escolares y aumentarlos año tras año según las necesidades de desarrollo. Los fondos de la biblioteca incluyen tarifas de adquisición de recursos de documentación e información, tarifas de operación y tarifas especiales de construcción. Los gastos operativos incluyen principalmente honorarios de mantenimiento de equipos e instalaciones y gastos de oficina.