Pero si abre la boca, ¡es una pesadilla! En este caso, el proceso de evolución fue casi replicado: ¡el pez tiene dientes casi idénticos a los de los humanos! ¿Por qué sucede esto en la naturaleza? En realidad, es bastante simple: considere nuestros hábitos alimentarios. Los dientes humanos son adecuados para masticar diversos alimentos, pero a este pez le gusta comer semillas de plantas y nueces, que son similares a nuestros dientes.