¿Cómo se diagnostica la tuberculosis ósea? ¿La alta tasa de sedimentación globular es tuberculosis ósea?

El diagnóstico precoz de la tuberculosis ósea es difícil. Muchos pacientes no son diagnosticados en una fase temprana, lo que provoca que no reciban un tratamiento sintomático eficaz y la enfermedad empeora. No sólo el paciente sufre, sino que también dificulta el tratamiento.

De hecho, en el diagnóstico precoz, el interrogatorio detallado de la historia clínica del paciente ayudará a diagnosticar mejor la tuberculosis ósea.

La aparición de la tuberculosis ósea y articular suele ser lenta y los síntomas sistémicos están ocultos. Los pacientes pueden presentar fiebre baja, fatiga, sudores nocturnos, pérdida de apetito y pérdida de peso. Sólo unos pocos casos presentan ataques agudos además de los síntomas anteriores, con fiebre alta en torno a los 39 grados, que se confunde fácilmente con otras infecciones agudas. El diagnóstico será útil para quienes hayan tenido tuberculosis pulmonar, pleuresía, tuberculosis linfática o tuberculosis del sistema urinario en el pasado o al mismo tiempo, tengan antecedentes de contacto cercano con pacientes con tuberculosis o tengan pacientes con tuberculosis en sus familias.