En 1900, el físico teórico alemán Max Planck revolucionó el campo de la física al descubrir que la energía no fluye uniformemente sino que se libera en formas discretas. Planck creó una ecuación para predecir este fenómeno y su descubrimiento puso fin a la primacía de lo que muchos ahora llaman "física clásica" en favor de la física cuántica.
A pesar de la sensación de que se sabe todo sobre el campo de la física, todavía existe un problema que ha preocupado a los físicos durante décadas: no pueden comprender este sorprendente resultado que siguen obteniendo al calentar superficies que absorben impactos de todas las frecuencias Luz, también conocida como cadáver negro.
A pesar de los esfuerzos de los científicos, no pudieron explicar los resultados utilizando la física clásica.
Max Planck nació en Kiel, Alemania, el 23 de abril de 1858, y consideró convertirse en pianista profesional antes de que un profesor dirigiera su atención a la ciencia. Posteriormente, Planck se licenció en las universidades de Berlín y Munich.
Después de cuatro años como profesor asociado de física teórica en la Universidad de Kiel, Planck se trasladó a la Universidad de Berlín, donde se convirtió en profesor titular en 1892.
El interés de Planck era la termodinámica. Al estudiar la radiación del cuerpo negro, se encontraba continuamente con los mismos problemas que otros científicos. La física clásica no pudo explicar los resultados que encontró.
En 1900, Planck, de 42 años, descubrió una ecuación para explicar los resultados de estas pruebas: E=Nhf, donde E=energía, N=entero, h=constante y f=frecuencia. Para determinar esta ecuación, Planck propuso una constante (h), ahora conocida como "constante de Planck".
Lo sorprendente del descubrimiento de Planck fue que la energía que parecía liberarse en longitudes de onda en realidad lo era en pequeños paquetes que llamó "cuantos".
Esta nueva teoría de la energía revolucionó la física y abrió el camino a la teoría de la relatividad de Einstein.
Al principio, no se comprendió del todo la importancia del descubrimiento de Planck. La naturaleza revolucionaria de su descubrimiento no se haría realidad hasta que Einstein y otros utilizaran la teoría cuántica para lograr mayores avances en la física.
En 1918, la comunidad científica se había dado cuenta plenamente de la importancia del trabajo de Planck y le concedió el Premio Nobel de Física.
Continuó sus investigaciones e hizo nuevas contribuciones al desarrollo de la física, pero nada comparado con su descubrimiento en 1900.
Aunque Planck logró mucho en su carrera, su vida personal estuvo marcada por la tragedia. Su primera esposa murió en 1909 y su hijo mayor, Carl, murió durante la Primera Guerra Mundial. Las hijas gemelas Margaret y Emma murieron más tarde al dar a luz. Y su hijo menor, Erwin, estuvo involucrado en el complot de julio para asesinar a Hitler y fue ahorcado.
En 1911, Planck se volvió a casar y dio a luz a un hijo, Hermann.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Planck decidió quedarse en Alemania. Aprovechando su influencia, el físico intentó defender a los científicos judíos, pero con poco éxito. En protesta, Planck dimitió como director del Instituto Kaiser Wilhelm en 1937.
En 1944, una bomba alcanzó su casa durante un ataque aéreo aliado, destruyendo muchas de sus posesiones, incluidos todos sus cuadernos científicos.
Max Planck murió el 4 de octubre de 1947, a la edad de 89 años.