1. Vístete apropiadamente. Nos han enseñado a vestirnos apropiadamente desde pequeños. En el lugar de trabajo, ¿qué significa ser apropiado? Esto se determina en función del puesto de trabajo para el que está entrevistando. Si está entrevistando en la industria del entretenimiento, puede vestirse de manera más informal. Si está entrevistando para un asistente de liderazgo o algo similar, no debe vestirse de manera demasiado informal.
2. Cuando se trata de ropa, hablemos de combinar. En un entorno de entrevista más formal, es mejor no usar más de tres colores en total, especialmente para los niños. La sensación es cómoda, de lo contrario será deslumbrante y no será buena.
3. Se debe preparar un currículum. He entrevistado a algunas personas que no trajeron su currículum a la entrevista. Cuando llegaron a la empresa, me preguntaron si se lo podía imprimir. Incluso si lo imprimo para usted, su impresión en la mente del entrevistador se reducirá considerablemente.
4. Utiliza un lenguaje apropiado. Algunas empresas tienen una cultura corporativa relativamente joven. Muchas personas comienzan a dejarse llevar cuando ven que el entrevistador habla más durante la entrevista. Este comportamiento no es recomendable. El subtexto de la entrevista es en realidad "para ver si es agradable". "Si tu personalidad puede adaptarse a este puesto", intenta hablar de cosas relacionadas con el trabajo y no hables demasiado de cosas irrelevantes.
5. Cuestiones de cortesía. Al entrar, llama primero antes de entrar. Después de la entrevista, si la puerta está cerrada, ciérrala y agradece al personal correspondiente. Son detalles muy pequeños, pero en el lugar de trabajo los detalles determinan el éxito o el fracaso.
6. No interrumpas a la otra persona. Si el entrevistador está de buen humor y se sale del tema mientras charla, no te impacientes en este momento espera a que la otra persona termine de hablar antes de responder, o si habla de un tema que te interesa mucho, no. No interrumpas a los demás y hables de ello tú mismo. Si te apresuras y dices tonterías, parece muy poco calificado. ¿Quién sabe si en el futuro interrumpirás así a tu jefe durante las reuniones de trabajo? ¡Bien!