Después de la crisis financiera, se tomaron cuatro medidas: primero, según los requisitos de negociación del Fondo Monetario Internacional, antes de 2004 se determinó que la emisión de moneda debería controlarse con un incremento del 30% y la inflación debería controlarse dentro de un margen del 30%. El objetivo de política monetaria estaba dentro del 5% de incremento, y luego se determinó un sistema de tipo de cambio flotante estable basado en las expectativas de inflación a partir de enero de 2004. El segundo es restaurar la confianza de la gente en los bancos. Durante la crisis, el número de bancos en China cayó de más de 90 a más de 50, y los niveles de ingresos de los empleados también se redujeron a la mitad. Medidas como la congelación de depósitos y la pesificación forzada han causado más daño a los ahorradores (los depósitos en pesos se han depreciado en más de 2/3), y la gente no está dispuesta a depositar en los bancos y tiene miedo de hacerlo. Después de la crisis, cuando el gobierno hizo un llamado para restaurar la confianza de la gente en los bancos, la gente respondió al llamado del gobierno y los ahorros se recuperaron rápidamente, alcanzando 64,72 millones de pesos en junio de 2003, un aumento de 9,92 millones desde el nivel más bajo de 540.000 pesos en julio de 2002. Ambos crecieron un 1,7%. En tercer lugar, alentar a los bancos a aumentar los préstamos al sector privado, cambiar fundamentalmente la práctica anterior a la crisis de exigir a los bancos que aumentaran excesivamente los préstamos al sector público y promover la recuperación económica. Cuarto, restringir estrictamente las remesas de dólares estadounidenses y las importaciones de productos básicos, fomentar las exportaciones agrícolas y atraer turistas extranjeros a Afganistán, y aumentar el superávit de cuenta corriente. Cuarto, al mismo tiempo que se reforma el sistema tributario y se fortalece la recaudación y gestión tributaria, se deben hacer esfuerzos para controlar los gastos fiscales y lograr un equilibrio o superávit fiscal.
¿Cómo escapó Argentina de la crisis financiera?
Para resolver la crisis financiera, el gobierno argentino adoptó una serie de medidas de política: Al inicio de la crisis financiera, se vio obligado a tomar dos medidas: Primero, aprobó la "Ley de Emergencia Pública y Reforma del Sistema Cambiario", lo que dio al nuevo presidente un poder económico casi ilimitado para responder a las crisis. Los depósitos bancarios fueron congelados y los depósitos en dólares fueron convertidos a la fuerza en pesos a un tipo de cambio de 121,4. El segundo es solicitar asistencia del Fondo Monetario Internacional para "liquidar la deuda" (es decir, suspender temporalmente el pago del principal y los intereses de la deuda externa que vence) y, finalmente, negociar la reestructuración de la deuda con acreedores de instituciones financieras internacionales y otras instituciones internacionales. instituciones para obtener asistencia crediticia, reducir y posponer la carga de pago de la deuda.