1. Mantén la calma
Debes mantener la calma cuando tus compañeros te acosen. Después de todo, no fuiste tú quien cometió el error, sino el abusador. El resultado final será que se juzgue su culpa, no la tuya. Trate de calmarse hasta que se le ocurra una mejor manera de manejarlo.
2. No juegues duro.
Después de todo, hay más gente allí que tú. Si realmente quieres pelear, es posible que no seas su oponente y te lastimarás, así que no te enfrentes cara a cara con el oponente.
3. Intenta escapar del lugar.
Cuando te encuentres con violencia escolar, no discutas con la otra parte, porque son irracionales y no escucharán tu argumento en absoluto, por lo que pueden intentar huir de la escena.
4. Notifique al maestro de la escuela
Si se encuentra con violencia escolar, debe informar al maestro de la escuela y pedirle que proteja su seguridad personal. Debido a que estás en la escuela, la escuela tiene la responsabilidad de mantenerte seguro.
5. Notificar a los padres
Muchos estudiantes sufren acoso en la escuela pero no se atreven a decírselo a sus padres cuando regresan a casa. De hecho, es un malentendido. Después de todo, tus padres pueden ayudarte a resolver cosas que no puedes resolver por tu cuenta.
Notas:
1. Cuando ocurren conflictos entre niños, los padres no necesitan intervenir activamente y convertirse en jueces del bien y del mal.
Cuando los padres descubren que sus hijos tienen conflictos de comunicación, primero deben mantener la calma. Mientras no haya peligro, debe ser simplemente un espectador tranquilo, sin interferir y sin defender al niño. Los padres deben creer en las capacidades de sus hijos y brindarles oportunidades para resolver los conflictos por sí mismos.
2. Los padres no deben prestar demasiada atención a lo que les sucede a sus hijos en el colegio.
Los padres no siempre pueden estar al lado de sus hijos, y cultivar la capacidad de sus hijos para resolver conflictos bajo su control es la mejor manera de ganar.