Los buenos hábitos benefician a las personas durante toda su vida. Un erudito de cabello gris cree que los hábitos que aprendió en el jardín de infantes, como "dar la mitad de tus cosas a tus amigos y observar cuidadosamente la naturaleza que te rodea", son las cosas más importantes que aprendió. Sus buenos hábitos le beneficiaron mucho y ganó el Premio Nobel.
Se puede comprobar que los buenos hábitos pueden beneficiar a las personas de por vida. Los antiguos decían que un país es fácil de cambiar, pero la naturaleza de una persona es difícil de cambiar. La naturaleza aquí se refiere al hábito. Muchas personas se benefician de los buenos hábitos a lo largo de su vida. Por ejemplo, cuando era directivo de la empresa farmacéutica municipal, siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás, entusiasmado por ayudar a los demás, defendiendo la justicia y siendo considerado. Este año, cuando vio a tres gánsteres insultando a la conductora del autobús número 2, inmediatamente dio un paso adelante para detenerlos. Bajo los puñetazos y patadas de los gánsteres, dijo: "Ocúpate de tus propios asuntos incluso si me matas a golpes". Imagínense, si el camarada Tiempo no tiene la buena costumbre de ayudar a los demás, ¿cómo podrá resistir en los momentos críticos? Este es un acto valiente, la cristalización de sus buenos hábitos y el destello de sus buenos hábitos.