Para cualquier plan, hay dos puntos a considerar: primero, el plan debe ser absolutamente bueno; segundo, debe ser fácil de implementar.
Nacemos frágiles, por eso necesitamos fuerza; nacemos sin nada, por eso necesitamos ayuda; nacemos ignorantes, por eso necesitamos la capacidad de juzgar. Lo que no tenemos al nacer, lo que necesitamos cuando crecemos, nos lo debe dar la educación.
Vida, esta es la habilidad que quiero enseñarle.
La vida no es respiración, sino actividad, que es utilizar nuestros órganos, nuestros sentimientos, nuestros talentos y todas las partes de nosotros que nos hacen sentir nuestra existencia. La persona que vive la vida más significativa no es la que vive más tiempo, sino la que siente la vida más profundamente.
Simpatizamos con el destino de nuestros hijos, pero deberíamos simpatizar aún más con nuestro destino. Nuestros mayores desastres son todos causados por nosotros mismos.
Enséñale todos los conocimientos, pero no le enseñes a conocerse a sí mismo, no le enseñes a aprovechar sus puntos fuertes, no le enseñes cómo vivir y cómo buscar su propia felicidad. .
Es mejor utilizar el talento para compensar el entusiasmo que utilizar la pasión para compensar el talento.