Comunícate con tus hijos y escúchalos.
Comunícate más con tus hijos para que poco a poco puedan comprender y crecer en la vida. Respete la elección del niño y juzgue lo que está bien y lo que está mal basándose en las palabras y acciones del niño, en lugar de interferir por la fuerza.
Hereda la experiencia y deja que los niños crezcan de forma independiente
Comparte tu sabiduría con tus hijos y deja que ellos decidan su propio camino futuro. Dale la iniciativa a tus hijos y déjales aprender a pensar y tomar decisiones de forma independiente.
La energía positiva nutre a los niños y los hace más brillantes.
Proporcione a los niños libros positivos y recursos en vídeo para que puedan prosperar en un ambiente positivo. Estos niños son más sensatos y alegres y, naturalmente, respetarán más a sus padres.