Yang Huo quería ver a Confucio. Confucio ya no está, es un delfín. Cuando Confucio murió, fue a adorarlo. Al encontrar varias pinturas, dijo que Confucio dijo: Ven, dame tus palabras, y quedó fascinado por su tesoro nacional. Se puede decir que es amable, difícil de hacer y con muchas ganas de perder el tiempo. Se puede decir que Zhihu dijo que es difícil de hacer, que el sol y la luna no tienen luz y que los años no me seguirán. Confucio dijo: "Sí".
Yang Huo quería que Confucio lo visitara, pero si Confucio se negaba, le daba un cochinillo cocido y quería que Confucio fuera a su casa para agradecerle. Tan pronto como Confucio supo que no estaba en casa, fue a darle las gracias. Los dos se encontraron en el camino. Le dijo a Confucio: "Ven aquí, tengo algo que decir". Confucio se acercó. Él dijo: "¿Puedes ser llamado benevolente si tienes la capacidad pero arruinas el país?" "No". "¿Es sabio querer hacer grandes cosas pero nunca aprovechar la oportunidad? ¿Es esto sabio?" 't. El tiempo pasa día a día y el tiempo no espera a nadie. Confucio dijo: "Está bien, quiero ser funcionario".