Este artículo explica los fenómenos meteorológicos comunes y su impacto en el vuelo.

Las amenazas y los peligros que plantean los fenómenos naturales para la aviación son asombrosos; a continuación se presentan algunos de los fenómenos meteorológicos y sus amenazas para millones de vuelos en todo el mundo cada año:

1. Rayos Sólo unos pocos aviones fueron alcanzados por un rayo y explotaron. Hoy en día, los avances en los sistemas de radar y el pronóstico del tiempo facilitan que los aviones eviten tormentas y relámpagos.

Los rayos normalmente caen en las puntas de las alas, el morro o la cola de un avión y luego se dispersan a través de la piel del avión. Las carcasas de los aviones están fabricadas principalmente de aluminio, que es un buen conductor de la electricidad. Muchos "truenos y relámpagos" son generados por el propio avión, principalmente cuando el avión asciende o desciende entre las nubes.

La caída de un rayo puede hacer que las luces de un avión parpadeen, pero mientras no haya grietas en la superficie del avión, la mayor parte de la energía se libera de nuevo al aire. Los revestimientos de los aviones modernos suelen estar hechos de materiales sintéticos de alta calidad que son menos conductores que el aluminio. Las aves que son absorbidas por los motores son otra amenaza aérea que pueden enfrentar los aviones.

2. Las turbulencias y las turbulencias son un problema común y casi todos los pasajeros han experimentado turbulencias en el aire.

La turbulencia es un movimiento del flujo de aire que es invisible a simple vista y que a menudo ocurre de forma inesperada. Las turbulencias pueden ser causadas por cambios de presión, corrientes en chorro, frentes fríos, frentes cálidos y tormentas eléctricas, incluso en cielos despejados. La turbulencia no siempre es predecible e invisible para el radar.

Si bien las turbulencias pueden provocar impactos graves en la cabeza, por lo general es poco probable que sean mortales. Según estadísticas de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos, desde 1980 hasta junio de 2004, se produjeron un total de 198 accidentes por turbulencias en aviones estadounidenses, que provocaron 266 heridos graves y tres muertes.

En tercer lugar, durante la temporada de tormentas de verano, las tormentas suelen representar una amenaza para los aviones. En general, la amenaza que suponen las tormentas proviene principalmente del movimiento convectivo del aire. Las fuertes corrientes ascendentes y descendentes pueden hacer que una aeronave vuelque, causando daños o algo peor.

Cada minuto, un pronosticador especial envía información meteorológica a los aviones para ayudarles a evitar fenómenos meteorológicos peligrosos. El personal de control de tráfico aéreo siempre presta atención a los cambios climáticos en su jurisdicción y guía a las aeronaves para que despeguen y aterricen con la debida diligencia.

El radar puede detectar corrientes de aire giratorias, que pueden ser precursoras de huracanes.

4. Cuando hace frío en invierno, el hielo en las alas puede representar una gran amenaza (esto también es un motivo de retrasos en los vuelos).

La formación de hielo en las alas se refiere al fenómeno en el que las gotas de agua sobreenfriada se adhieren a las alas y se condensan en hielo. Cuando se forma hielo en las alas, puede causar que la velocidad y la altitud disminuyan al mismo tiempo, lo que provoca una caída. ACCIDENTE catastrófico.

La formación de hielo en las alas puede ocurrir en el aire o en un avión que espera despegar en tierra. Esta es la causa de muchos accidentes aéreos, incluidos algunos aviones de pasajeros grandes, pero este fenómeno ocurre con mayor frecuencia en vuelos cortos. vuelos de transporte y aviones pequeños; ahora existe una variedad de materiales que se pueden aplicar a las alas antes del despegue para evitar la formación de hielo.