Un ensayo vespertino inolvidable de 600 palabras.

¡Las flores están floreciendo! De manera invisible, hemos pasado por dos años de primavera, verano, otoño e invierno. ¡Estoy muy feliz de tenerte en mi vida! ——Inscripción

Siempre hay demasiados arrepentimientos en mi corazón, pero no sé por dónde empezar; siempre hay demasiados arrepentimientos en mi corazón, pero no sé cómo redimirlos; ; siempre hay demasiados arrepentimientos en mi corazón, pero no sé por dónde empezar. Tengo tantos agravios en mi corazón, pero no sé a quién decírselos... Pero todo ha cambiado gracias a. tú.

El Padre Tiempo siempre avanza demasiado rápido, como si nunca pudiéramos seguir su ritmo. Antes de que tuviéramos tiempo de recordar cada detalle del primer y segundo grado de la escuela secundaria, nos empujaron hacia la aterradora puerta del tercer grado de la escuela secundaria. El tercer grado de la escuela secundaria no es tan hermoso como imaginábamos. En el tercer grado de la escuela secundaria, es posible que no haya nada que hacer excepto luchar por las apuestas.

Ya no hay aula ruidosa, sólo el "infierno" muerto; no más sonrisas brillantes, sólo la cara triste; no más infantilismo, sólo la mentalidad gradualmente madura... Todo cambia con el tiempo.

Han pasado dos años. Las cosas inolvidables son como las conchas en la playa que nunca se pueden recoger, así que solo podemos guardar las hermosas en bolsas. ¿Por qué no guardamos esos hermosos pasados? ¿Bolsas en mente?

¿Recuerdas aquella tarde? En ese momento, escuchamos a nuestro antiguo compañero decir que tendríamos un partido de baloncesto con la clase de al lado por la tarde. Cuando escuchamos esta impactante noticia, nos levantamos de un salto emocionados. Finalmente, el tan esperado partido de baloncesto está por comenzar. Verte lleno de confianza nos hace latir el corazón.

Al verte lanzar la pelota una y otra vez, parecemos ver el amanecer de la victoria. Corriste a la cancha a tu antojo y gritamos en el pozo sin fondo. Los hechos han demostrado que no decepcionaste a todos, e incluso le diste a la clase un suspiro de alivio. La feroz competencia terminó con nuestros aplausos. En este juego estábamos muy por delante por más de diez puntos. Desde el momento de defender el balón, bloquearlo y lanzarlo, a los demás les pareció muy fácil, pero no conocían el sudor y las lágrimas que había detrás. .

Pero el tiempo aún se escapaba sin piedad... La felicidad no duraba mucho y nunca podía escapar de las garras del tiempo.

Cuando no estábamos preparados, habíamos entrado en el campo minado del tercer grado de la escuela secundaria. Como si pisáramos una bomba si no tuviéramos cuidado, pasamos todos los días con cautela.

Esa tarde, dejamos de lado todas nuestras preocupaciones, corrimos y gritamos a todo pulmón. Aunque sabemos que no tenemos posibilidades de estar tan locos como antes, en el mundo de la juventud hemos estado locos juntos, así que no nos arrepentiremos.

En el último año, debemos avanzar en la dirección de nuestros sueños. El 2013 se convertirá en un recuerdo y el 2014 en nuestra motivación para seguir adelante. Las cosas del pasado son inolvidables, pero en este momento debemos dejarlas ir primero, por muy inolvidables que sean, están destinadas a convertirse en recuerdos, por eso no podemos quedarnos en ese momento.

Esa tarde fue el momento más feliz en tercer grado de secundaria, y también fue el momento más inolvidable...

Estoy lista para el 2014.

Las hojas caídas deben volver a sus raíces. ¿Nos enfrentaremos también a la separación en el futuro? ——Posdata