Espero que además de la prosperidad, al pie de las montañas verdes, haya cielo azul y nubes blancas, flores floreciendo y discos de borrachos bailando salvajemente. Utilice ciruelas de pino como amigos, balsas de bambú como amigos, verduras y pescado blanco como alimento y juncos silvestres como hogar. Bloqueando el mundo de nubes mortales y lluvia durante decenas de millas, deseo ser un phreak en las montañas, no un hada solitaria en el cielo.
En la temporada de primavera, cuando las flores florecen y son fragantes, las ciruelas verdes elaboran vino, las flores de durazno se reflejan en el agua que fluye, los pájaros en el bosque juegan, se juega al ajedrez, las flores son fragantes y las mariposas borrachas bailan salvajemente. Las flores son embriagadoras, pero la brisa es perfecta y el ambiente está al final del corral. Expresado en calidez, llega el cansancio y las flores del sueño son fuertes.
Hay sombras por todas partes, llenas de melancolía, en el bosque de las largas canciones. En los días soleados, recolectamos néctar y preparamos té; al anochecer, vamos a pescar entre nubes de colores y cantamos canciones tardías. Cuando llueve y hace viento, la puerta tapa el crepúsculo y la pluma escribe poesía. Cuando es ligero y fragante, está lleno de energía violeta y apasionado.
En esa estación de hojas que caen y brisa suave, los gansos de otoño persiguen las nubes y el viento del oeste arrastra los barcos. Mirando el agua otoñal, recogiendo crisantemos bajo la valla oriental. ¿Cuántas flores restantes han caído ligeramente? Laoshuangtai, a miles de kilómetros de distancia del río Han, te emborracharás sin beber. Acompañado del sol poniente, de sentimientos profundos,... del hermoso paisaje del país y de la embriaguez del polvo.
Las hojas se marchitan y las flores caen, y el cielo se llena de nieve. Invito a amigos cercanos, tomo vino caliente y río, un poco sentimental, canto canciones antiguas y río de los fuegos artificiales mientras camino en la nieve. Estaba borracho y dije que los gansos en el cielo nunca volarían y que quería guardarme las flores de ciruelo. ......
La sensación de las cuatro estaciones, llenas de ocio. Las flores florecen y caen, sonriendo como flores, cuidado con las hojas que caen y con dejarse embriagar por el viento otoñal. Prométele a Mei que la nieve caerá y que su corazón será el segundo loto en flor. Las olas brumosas son enormes y el río Yangtze está a miles de kilómetros de distancia. Si no puedes dejarlo ir, echará raíces. Agita tu corazón y la melancolía a tu alcance y entrégaselos a Yunshui.
El país es encantador, tantos recuerdos se emborrachan en los sueños. Las hojas muertas se resisten a separarse de las flores y las nueve canciones son antiguas y hermosas. Las mariposas se emborrachan con las flores, faltan barcos y cantan hasta tarde, recogiendo crisantemos y riéndose de los fuegos artificiales... sólo por el bien de la paz. Despreocupada, casual y espontánea.