Los morfemas inflexibles se refieren a morfemas que no pueden pronunciarse ni usarse solos para responder preguntas, como "para". A menudo decimos "genial" o "majestuoso", pero no sólo "genial".
Una palabra que no puede usarse como morfema sola significa que la palabra no es un morfema y debe combinarse con otras palabras para convertirse en un morfema. Por ejemplo, la palabra "esquivar" sólo tiene pronunciación y no tiene significado real. No es un morfema. Debe combinarse con "libélula" para expresar el sonido y tener sentido, por lo que puede contarse como un morfema.