La Aduana de Japón no sólo no redujo el número de inmigrantes, sino que en realidad aumentó el número de inmigrantes, por lo que cada día más personas van a Japón. Si algunas personas se infectan con virus como el COVID-19 y estos virus aparecen en la misma tierra en un instante, la situación en Japón definitivamente será más grave. Aunque Japón tiene menos población que otros países, el número de casos confirmados es mucho mayor que el de otros países, e incluso ocupa el primer lugar. Por lo tanto, deben reducir el número de personas que ingresan al país todos los días y no pueden seguir permitiendo que se desarrolle.
Los residentes locales en Japón todavía van a trabajar con normalidad. Aunque todos usamos mascarillas, cada día entramos en contacto con muchas personas y objetos, por lo que nuestra salud todavía no está protegida. Ciertamente, cada vez hay menos camas vacías en los hospitales y se gasta más dinero en tratamientos. Algunas personas tienen malas condiciones económicas y no pueden permitírselo, por lo que sólo pueden recibir tratamiento en casa. Pero algunas personas con mejor salud pueden recuperarse y la condición de los ancianos y los niños empeorará.
Los pacientes confirmados deben estar vacunados y recibir una buena atención médica. Si el país pudiera proporcionar atención médica gratuita, se recuperarían más rápido, pero sus condiciones económicas simplemente no pueden mantenerse al día y pueden obstaculizar el desarrollo del país. Varios artículos también deben ser inspeccionados cuidadosamente al ingresar al país y no pueden usarse directamente porque el virus sobrevivirá en la superficie durante mucho tiempo.