El complejo sistema de escritura es una característica importante del idioma japonés, que incluye tres sistemas de escritura: kanji, hiragana y katakana.
Los caracteres kana y chinos se utilizan a menudo en la vida diaria, y los romaji se utilizan a menudo en letreros o anuncios. La pronunciación fonética de los kanji japoneses utiliza hiragana en lugar de caracteres romanos.