El autoestudio pone a prueba tus habilidades multifacéticas, tu fuerza de voluntad personal y tu perseverancia en el aprendizaje. Tienes que deshacerte de esta parte y prepararla con antelación. Si desea aprender más rápido, le sugiero que asista a una clase de tutoría, para que el ritmo de aprendizaje sea más rápido y el efecto de aprendizaje real sea mejor.
Antes de aprender japonés, fíjate un pequeño objetivo: personalizar tu propia motivación y tipo de aprendizaje. Por ejemplo, si desea estudiar en el extranjero o realizar una investigación, incluso puede realizar el examen de ingreso a la universidad japonesa o el examen de ingreso de posgrado. En definitiva, hay que ejercer cierta presión sobre uno mismo, por no hablar del autocontrol.
Pero muchas veces no basta con estudiar sólo porque te interesa, porque obligarte a aprender japonés no está mal, pero este proceso seguramente será doloroso. Si tienes una gran motivación para aprender y autocontrol, y estás interesado en el japonés, entonces el proceso de aprendizaje será mucho más feliz y será más fácil persistir.
La mayor desventaja del autoestudio de japonés es la falta de orientación y planes de estudio por parte de profesores experimentados, por lo que también falta una formación sistemática y la base puede no ser lo suficientemente sólida. Además, en las etapas intermedia y tardía del aprendizaje, habrá algunas dificultades para comprender contenidos difíciles. Si hay dudas es difícil resolverlas a tiempo. Con el tiempo, algunos contenidos clave y difíciles se volvieron menos sólidos.