Desde la exitosa detección de moléculas interestelares mediante radioastronomía en 1963, el estudio de las moléculas interestelares ha logrado grandes avances. Especialmente en la última década, se han descubierto muchos tipos de moléculas en el espacio interestelar y en galaxias extragalácticas cercanas. A finales de 1979 se habían identificado más de 50 tipos de moléculas interestelares y en 2004 se habían identificado más de 130 tipos. Cada molécula suele tener varias o incluso cientos de fuentes, distribuidas en varias regiones con diferentes condiciones físicas en el espacio interestelar, como el centro de la Vía Láctea, regiones de hidrógeno ionizado e hidrógeno neutro, materia circunestelar, nebulosas oscuras, restos de supernovas y estrellas infrarrojas. Espera cerca. Algunas moléculas, como el monóxido de carbono, están ampliamente distribuidas y pueden usarse para estudiar la estructura de los brazos espirales de la Vía Láctea y otras galaxias. Pero algunas moléculas sólo se encuentran en nebulosas muy densas. La famosa Nebulosa de Orión A, ubicada en la región del hidrógeno ionizado, es una de las fuentes de moléculas más detalladas a partir de las cuales se han descubierto muchas moléculas. Sagitario A y Sagitario B2 en el centro de la Vía Láctea son fuentes más ricas de moléculas, de las que se pueden encontrar casi todas las moléculas interestelares descubiertas. El proceso de formación y evolución química de las moléculas interestelares no está muy claro. Existen algunas teorías que sostienen que se forman por la colisión de átomos (moléculas) ionizados con la ayuda de partículas de polvo en nubes de gas. Comprender el proceso de formación de muchas moléculas, especialmente las orgánicas, y su relación con el origen de la vida en la Tierra es un tema importante en la química interestelar, una nueva rama de la astronomía.
La historia de la investigación sobre moléculas interestelares
El estudio de las moléculas interestelares fue realizado originalmente por astrónomos dedicados a la investigación astroquímica. La astroquímica estudia principalmente la formación y el comportamiento de moléculas interestelares y peristelares para explorar la evolución de los planetas. El primer tipo de molécula interestelar, el CH, fue deducido por Swings y Rosenfeld en 1937 basándose en el análisis espectral. Más de 20 años después, por falta de medios de observación, los científicos sólo identificaron dos moléculas interestelares, CN y CH. Este lento progreso no mejoró hasta la década de 1960 debido a los avances en la radioastronomía.