Reemplazar las materias primas que contienen benceno por materias primas libres de benceno es la clave para prevenir la intoxicación por benceno.
La protección en los lugares de trabajo donde se utiliza benceno es principalmente para reforzar la ventilación y la protección personal de los empleados. Los trabajadores pueden usar máscaras antigás o máscaras antigás suministradas por aire. Los pacientes con enfermedades de la sangre, enfermedades del hígado y los riñones y asma no son adecuados para el trabajo con benceno.
Utilice tolueno y otros productos químicos no tóxicos o poco tóxicos en lugar de benceno como disolvente: realice ventilación y desintoxicación; prohíba lavarse las manos con benceno; use una máscara antigás cuando se exponga a vapor de benceno en alta concentración. En caso de intoxicación aguda, se debe trasladar rápidamente al paciente al aire libre, mantener abiertas las vías respiratorias, quitarse inmediatamente la ropa contaminada con benceno, lavar la piel contaminada con agua y jabón y mantener calientes a quienes hayan dejado de respirar y de tener latidos cardíacos; someterse inmediatamente a respiración artificial. Una vez que se diagnostica la intoxicación por benceno, se deben separar los trabajos que impliquen exposición al benceno y se debe organizar un descanso adecuado además del tratamiento activo.