La biotecnología es una de las altas tecnologías de mayor crecimiento en el mundo. En la década de 1970 se inventaron la tecnología del ADN recombinante y la tecnología del hibridoma. En la década de 1980, se estableció la tecnología transgénica de cultivo celular a gran escala. A principios de la década de 1980, los productos farmacéuticos de la biotecnología moderna, especialmente la invención de la tecnología PCR, hicieron que el desarrollo de la biotecnología moderna avanzara a pasos agigantados. En la década de 1990, con la implementación del Proyecto Genoma Humano, importantes proyectos de genoma microbiano y de cultivos y la penetración de la tecnología de la información, una serie de pruebas de análisis automatizadas y tecnologías de detección de fármacos, como la genómica funcional, la bioinformática, la química combinatoria y la tecnología de biochips, Los equipos se desarrollaron uno tras otro. En la actualidad, diversas biotecnologías emergentes se han utilizado ampliamente en tratamientos médicos, agricultura, bioprocesamiento, desarrollo y utilización de recursos, protección ambiental y otros campos, y han tenido un profundo impacto en el desarrollo de la industria farmacéutica.
El desarrollo de la biotecnología ha pasado por dos etapas: la biotecnología tradicional y la biotecnología moderna. Actualmente se habla mucho de biotecnología moderna. Incluye ingeniería genética, ingeniería celular, ingeniería enzimática e ingeniería de fermentación, entre las cuales la ingeniería genética es la tecnología central. Dado que la biotecnología abrirá amplias perspectivas para resolver los principales problemas que enfrenta la humanidad, como los alimentos, la salud, el medio ambiente y la energía, figura como una tecnología de alta tecnología junto con la tecnología microelectrónica informática, nuevos materiales, nuevas energías y tecnología aeroespacial, y está considerada como el núcleo de la ciencia y la tecnología del siglo XXI. En la actualidad, el campo de aplicación más activo de la biotecnología es la industria biofarmacéutica (normalmente denominada fármacos recombinantes) y es considerada por los inversores como una de las industrias de mayor crecimiento. Las principales compañías farmacéuticas del mundo han puesto sus miras en el objetivo e invertido fuertemente en el desarrollo de medicamentos biológicos, lanzando una competencia feroz sin precedentes de cara al siglo XXI.