El Panchen Lama tiene un alto estatus religioso en nuestro país. Es uno de los dos Budas vivientes reencarnados de la Secta Gelug (Secta Amarilla) del budismo tibetano y es considerado como la encarnación de Amitabha. En la mente del pueblo tibetano, el Panchen Lama es un líder espiritual parecido a un dios. Sin embargo, el Panchen Lama no asume responsabilidades administrativas ni goza de rangos administrativos. Su posición en el gobierno se debió principalmente a su estatus e influencia como líder religioso. El Panchen Lama es también vicepresidente de la Asociación Budista de China y miembro del Comité Permanente del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino, y disfruta del poder de participar y discutir asuntos políticos.