¿Cómo educar a niños especialmente sensibles? ¿Cómo educar a niños sensibles?

1. No amenace ni regañe a sus hijos y trate a los niños sensibles de forma lenta y racional. Los niños sensibles tienden a ser obsesivos, por eso los padres deben tener más paciencia. Cuando tenga problemas, no amenace ni regañe a sus hijos. El comportamiento del niño no necesariamente representa su corazón, porque no es bueno para expresarse y se expresará de manera extrema. Por lo tanto, los padres deben razonar lentamente con sus hijos; de lo contrario, es probable que los niños se vuelvan cada vez más autistas.

2. Lleva a tus hijos a viajar más a menudo. Viajar significa más para los niños de lo que los adultos pueden imaginar. Cuanto más sepa, más amplia será su mente y estará más dispuesto a abrirse, permitiendo que los niños introvertidos y sensibles se vuelvan más extrovertidos y más dispuestos a llevarse bien con los demás. Haga nuevos amigos para su hijo sensible. Los niños pueden ser reacios a abrirse a sus padres, pero pueden contarle todo a sus amigos.

3. Es importante que los niños sensibles hagan amigos, no sólo para permitirles expresarse mejor, sino también para conocer los pensamientos de sus amigos. Si hay una etapa en la que quieres decírselo al maestro pero no quieres decírselo a ti mismo, entonces díselo a tu buen amigo y deja que él se lo cuente al maestro. Por ejemplo, si tu trenza está suelta, pídele a su buen amigo que se lo diga al maestro, y el maestro se acercará y te peinará la trenza.

4. Enseñar a los niños sensibles el derecho a decir "no". Un niño sensible llorará cuando se enfrente a algunas críticas menores, o llorará cuando otros ignoren sus saludos. En este momento, lo que más hay que decirles a estos niños sensibles no es cómo aceptar estas críticas, o "Simplemente no te respondí, ¿cuál es el problema? Podemos decirle que tiene derecho a no aceptar". Críticas de los demás. En este mundo no todo el mundo es tan sensible como nosotros y algunas personas pueden optar por no responder a nuestros saludos. Hay que confiar en la profundidad del pensamiento de los niños sensibles, pero pueden quedarse atrapados fácilmente en sus propios circuitos cerebrales. En este momento, siempre que lo saques un poco, podrás entender este asunto.