El Internet de las cosas se refiere a conectar cualquier objeto a la red a través de equipos de detección de información de acuerdo con un protocolo acordado, e intercambiar y comunicar información a través de medios de información, realizando así las funciones de identificación, posicionamiento, seguimiento y supervisión.
Existen dos tecnologías clave para la aplicación del Internet de las Cosas: la tecnología de sensores y la tecnología integrada. La industria del IoT está todavía en su infancia. Aunque sus perspectivas de aplicación son muy amplias y se convertirá en el futuro en una nueva industria estratégica en nuestro país, sus estándares, tecnología, modelos de negocio y políticas de apoyo están lejos de estar maduros.
La clave para el Internet de las cosas son las aplicaciones de "gran integración" La clave para realizar aplicaciones integradas a gran escala del Internet de las cosas son el middleware y las soluciones. El desafío actual es lograr la interconexión y la "integración de gestión, control y operación" entre estos sistemas nuevos y existentes a través del intercambio de datos estandarizado.
El Internet de las cosas se ha convertido en un período crítico de industrialización y estandarización, y existe una cierta brecha con los países desarrollados en industrialización y tecnologías clave. Existe una necesidad urgente de implementar una estrategia de estandarización de IoT centrada en la percepción. Es necesario confiar en las ventajas existentes de la estandarización internacional para acelerar la formación de un patrón industrial de "* * subconjuntos de aplicaciones de plataforma".