Jugar con niñas de secundaria

Por un lado, la escuela no castiga lo suficiente a los perpetradores y no hace nada; por otro, la sociedad no presta suficiente atención a la violencia escolar y las propias víctimas también tienen ciertos problemas. Por lo tanto, la violencia en el campus siempre surge sin cesar.

La violencia escolar a menudo hace que las víctimas se sientan desesperadas, enojadas y frustradas. Algunos estudiantes sufrieron depresión y se vieron obligados a suicidarse, mientras que otros se vieron obligados a resistirse y suicidarse. Si bien cometer violencia escolar puede ser ilegal, siempre está prohibido por varias razones. La violencia escolar es un tipo de comportamiento agresivo antisocial que causa graves daños físicos y mentales a los estudiantes victimizados, que pueden durar toda la vida.

¿Qué pasó cuando un estudiante de secundaria abofeteó a una compañera en el baño?

Wuzhong de Ningxia expuso un vídeo en Internet de una niña de una escuela secundaria en el condado de Tongxin abofeteando a otra niña en el baño. Posteriormente, la Dirección de Educación respondió que la Dirección de Seguridad Pública local había intervenido en la investigación. El estudiante violento tenía menos de 14 años, por lo que fue criticado y educado, y se le descontó su puntaje de evaluación de calidad general. Se dice que la violenta estudiante se disculpó con la familia de la niña que fue abofeteada y recibió el perdón de la familia de la víctima.

¿Por qué se sigue prohibiendo la violencia en el campus?

He hablado brevemente de tres razones por las que el acoso escolar sigue estando prohibido. Como la violencia escolar está relativamente oculta, es difícil para profesores y padres detectarla si los estudiantes abusados ​​no se atreven a hablar. Además, algunos padres y maestros pueden pensar que el acoso escolar es solo diversión y bromas entre los estudiantes, lo que también proporciona algunas razones y excusas para que la violencia escolar escape al castigo y fomenta de manera invisible la ocurrencia de acoso escolar. El acoso escolar puede causar daños físicos y psicológicos muy graves a los estudiantes acosados. Si no se elimina a tiempo, puede provocar fácilmente diversas enfermedades psicológicas y mentales, como depresión y ansiedad.

La violencia escolar debe gestionarse desde múltiples vertientes.

Para frenar por completo la violencia escolar, no podemos confiar únicamente en las escuelas para resolver el problema. Los padres de los estudiantes también deben participar activamente en la prevención de la violencia escolar. Además, los padres deberían prestar más atención a sus hijos y comunicarse con los profesores a tiempo para que los niños que se comportan de forma anormal puedan eliminar los problemas de raíz. Las escuelas también deberían educar y formar activamente a estudiantes y padres sobre la violencia escolar. En caso de violencia escolar, no sólo se debe castigar en consecuencia a los estudiantes, sino que también se debe educar a sus padres. La gobernanza colaborativa se lleva a cabo desde múltiples aspectos para hacer que los estudiantes universitarios abandonen la escuela y se vuelvan violentos.