Al dar a luz, el médico le preguntará sobre el historial de aborto espontáneo. ¿Qué pasará si no hablas?

Con la apertura de la sociedad, las relaciones sexuales en común comenzaron antes y el matrimonio real comenzó más tarde. Durante mucho tiempo antes del matrimonio, algunas personas tienen que abortar por falta de conocimientos sobre anticonceptivos o por fallo de los anticonceptivos. Esto es realmente común y comprensible. Sin embargo, la historia de abortos espontáneos y partos sólo puede ocultarse a los familiares y nunca a los médicos.

El médico pregunta por su seguridad física, seguridad fetal, etc. La observación clínica de big data muestra que los fetos de pacientes con antecedentes de aborto espontáneo tienen factores de alto riesgo como parto prematuro, bajo peso al nacer, asfixia fetal, hemorragia posparto y mala involución uterina. Si el miometrio se daña durante un aborto espontáneo, puede provocar rotura uterina, mayor sangrado y poner en peligro la vida de la madre y el feto.

Por ejemplo, existe una enfermedad mortal en obstetricia llamada "placenta accreta", cuyo síntoma es el sangrado masivo continuo después del parto. El principal factor de riesgo de placenta accreta es el historial de abortos espontáneos múltiples. Si los médicos lo saben a tiempo, le prestan atención a tiempo y lo abordan a tiempo, a menudo pueden convertir la crisis en seguridad. Sin embargo, si el obstetra no comprende en absoluto su situación y no ha preparado suficientes fuentes de sangre con anticipación cuando los síntomas son obvios, no podrá comunicarse a tiempo con los departamentos de anestesiología e intervención. Las consecuencias se pueden imaginar.

Los médicos deben tener una comprensión más completa del historial médico de las mujeres embarazadas y evaluar de manera integral la situación de las mujeres embarazadas en función de sus antecedentes de partos y abortos espontáneos. Especialmente cuando ocurren anomalías durante los exámenes prenatales, los médicos pueden evaluar el riesgo de las mujeres embarazadas en función de condiciones pasadas y tomar medidas preventivas o terapéuticas para evitar daños innecesarios. Sin embargo, ocultar la afección o engañar al médico puede tener consecuencias graves.

En resumen, las mujeres embarazadas nunca deben ocultar a sus médicos sus antecedentes de parto y aborto espontáneo. Si tienen privacidad, pueden decírselo al médico y el médico puede mantener la confidencialidad del paciente.