No muy inteligente, pero bueno en perseverancia. Estudia sin ser profundo, sé diligente pero sé claro. Mi talento es promedio, pero estoy concentrado. La pluma y la tinta están frías pero calientes, y los libros están tibios pero fríos. No hay malos amigos cuando se habla y se ríe, y todas las interacciones se realizan con buenos maestros y amigos serviciales. Puedes leer poesía y prosa. No hay cibercafés ni peleas. La cabeza del erudito se cuelga de la viga y el muslo del erudito está perforado con un punzón. Dije: ¿Por qué molestarse?
Si tu inteligencia no es alta, la diligencia bastará. Si no tienes muchos conocimientos, ganarás si te encanta pelear. Aunque es muy difícil, estoy dispuesto. El conocimiento es ilimitado, así que aprende mientras eres joven. Las tareas se acumulan y los exámenes se realizan con frecuencia. Podrás apreciar los clásicos y leer el Libro de los Cantares. No había ningún ruido en los oídos, sólo la forma normal del escritorio. Estudia mucho y no te detengas. Dije: ¿Por qué molestarse?
Primero aprende a ser preciso y diligente. Acostúmbrate, habla en serio. No es un genio, pero sí muy decidido. Escribiendo en la mesa, con la tinta en lo más profundo de mi pecho. Hubo charlas, risas, un buen asiento y discusiones sobre política y economía. Puedes discutir historia y recitar artículos famosos. Sin desorden ni formalidades complicadas. Universidad Tsinghua, Beijing, Universidad Fudan, Shanghai. El loco dijo: ¿Quién más sino yo?