Los maestros deben abandonar el método tradicional de educación moralista y brindar a los niños ayuda y orientación oportunas, para que puedan convertirse en el cuerpo principal de la educación, usar su cerebro y aprovechar su potencial.
Montessori creía que el impulso de vitalidad se expresa a través de las actividades espontáneas de los niños. "La vida es dinámica y sólo puede desarrollarse a través de actividades." Para que la vitalidad y la personalidad de los niños se expresen, se sientan satisfechas y se desarrollen a través de actividades, es necesario crear un entorno adecuado.
Montessori creó un buen ambiente para el "Hogar de los Niños": hay un gran jardín donde los estudiantes pueden entrar y salir libremente; mesas luminosas y sillas por las que los niños de 4 años pueden mover a voluntad; Hay un aula larga en el aula. Hay gabinetes bajos donde los niños pueden acceder libremente a varios materiales didácticos colocados en el interior. Un entorno de este tipo obviamente sirve para las actividades libres de los niños.
Datos ampliados
Principios básicos
1. Oponerse a la visión de la enseñanza centrada en los adultos y considerar a los niños como individuos independientes diferentes de los adultos.
2. Oponerse a la enseñanza intensiva. Se recomienda comenzar con el entrenamiento de la vida diaria, combinado con un buen ambiente de aprendizaje y abundante material didáctico, para que los niños puedan aprender de forma espontánea y activa y construir una personalidad perfecta por sí mismos.
3. Aprovechar el período sensible del niño. Siga las características del aprendizaje sensible para obtener los máximos efectos de aprendizaje.
4. El profesorado desempeña el papel de facilitador. Los maestros deben tener una comprensión profunda del mundo espiritual de los niños y una comprensión profunda del desarrollo de los niños para poder brindarles ayuda y orientación apropiadas y oportunas.
Enciclopedia Baidu-Maria Montessori