La civeta es un gato de cuerpo gris y cola larga. Más grande que los gatos domésticos actuales. La gente de aquella época estaba muy interesada en este extraño animal y lo introdujo en China. La llegada de la civeta puso por primera vez en contacto a los habitantes de China con los gatos.
Con el paso del tiempo, los gatos poco a poco se vuelven populares en China. Han sido domesticados y criados como animales de compañía para los humanos. La llegada de los gatos no sólo enriqueció la variedad de animales en China, sino que también controló en cierta medida el número de plagas como las ratas, desempeñando un papel positivo en la agricultura.