Así que, ya sea en una epidemia especial o en la vida diaria, debes prestar atención a lavarte las manos con agua corriente. Si omite este paso, lavarse las manos es inútil.
En casa, cuando nos lavamos las manos con jabón, nos acostumbramos a que toda la familia utilice el mismo jabón. De hecho, este comportamiento también es un hábito poco saludable y debe evitarse en la medida de lo posible.
Debido a que muchas personas usan un trozo de jabón juntos, la mayoría de las bacterias no pueden sobrevivir en el jabón, sin importar cuán alcalino sea. Sin embargo, si la primera persona no elimina la espuma residual del jabón después de su uso, las bacterias y los virus almacenados en la espuma pueden adherirse al jabón y puede ocurrir una infección cruzada cuando la segunda persona lo use nuevamente. Además, cuando utilizamos jabón debemos prestar atención a mantenerlo seco e higiénico, especialmente la caja donde se guarda el jabón. Porque, según un estudio estadounidense reciente, el jabón puede generar muchas bacterias en un ambiente húmedo.